Boletín
Boletín diciembre 2019
BOLETÍN DICIEMBRE 2019
ANÁLISIS DE COYUNTURA
Por Diego Portales Cifuentes. Director Ejecutivo Fundación Chile Descentralizado… Desarrollado
En el plazo de un mes, entre el 15 de noviembre y el 15 de diciembre, se han producido dos hechos de enorme relevancia para dar solución a la gran crisis política y social (con graves proyecciones económicas) que vive Chile.
El 15 de noviembre se logró un acuerdo constituyente. Por primera vez, en casi cuatro décadas, el sector que apoyó la dictación de la Constitución de 1980 se abrió a la posibilidad de reescribir la Carta Fundamental desde una hoja en blanco. Como toda negociación política, ese acuerdo se realizó en torno a una mesa con actores responsables que tuvieron que ceder para lograr el consenso. Algunos cuestionan que el acuerdo fuera firmado “entre cuatro paredes”, como si alguna vez hubiera sido posible establecer tratados de paz o acuerdos complejos en asambleas abiertas o en la calle; esos espacios sirven para el debate, el testimonio o la refriega, pero no para fundar algo perdurable.
Como toda base constituyente, especialmente en un país altamente centralizado, el acuerdo se logró en un solo espacio recogiendo desde la diversidad de posiciones las reglas que darán viabilidad al texto final que reemplace al actual.
El 15 de diciembre se expresó la diversidad del país. Movilizados por los alcaldes de todo el espectro político y de la gran mayoría de los municipios, la ciudadanía pudo expresar libremente sus demandas: nueva Constitución Política. Convención o Asamblea Constituyente 100% elegida por los ciudadanos (las sutilezas semánticas ya no tienen importancia), demandas sociales nacionales y prioridades locales. Ha sido una expresión democrática conmovedora que tiene un profundo mensaje político: la inmensa mayoría quiere una solución institucional pacífica a sus problemas y demandas. Algunos cuestionan el voto electrónico o la falta de registros actualizados, como si el enorme testimonio de quienes concurrieron a votar perdiera valor porque los resultados no sean exactos ni generen consecuencias vinculantes.
Como todo hecho político, esta expresión de la diversidad del país en más de dos centenares de municipios representa un aviso para el conjunto de instituciones y fuerzas políticas: no habrá salida pacífica del conflicto sin cumplir con rigor el acuerdo constituyente y con el respeto a la voluntad popular manifestada en las urnas el próximo mes de abril.
Queda bastante camino por andar, pero la obra gruesa está hecha y la decisión de los actores por completarla es irrevocable. Mal harían quienes tienen que acabar el trabajo en apartarse de la huella ya trazada.
CONSTITUCIÓN Y DESCENTRALIZACIÓN.
En el acto multitudinario de diciembre hay también un valor implícito que puede no estar consciente en muchos de los actores. Una mejor democracia y una sociedad más equitativa exige participación. Cuando se dice “Chile despertó” se está describiendo este cambio; la transición de los sujetos, antes percibidos como simples consumidores en un mercado y ahora con la potencia de sentirse ciudadanos en la arena de la política. Eso es lo que trae consigo participar en la definición de los destinos de la “polis”.
Nosotros en “Chile Descentralizado” sostenemos que no hay efectiva participación sin descentralización. Ni tampoco habrá real descentralización sin participación. Estos dos componentes se requieren el uno al otro.
Eso es lo que ha puesto en evidencia el ejercicio exitoso convocado por la Asociación Chilena de Municipalidades. Sobre esta base debemos construir el nuevo Estado descentralizado del porvenir. Nunca más los excesos de concentración del poder que, como dijera un presidente francés cuando alertó: “necesitamos de la centralización para construir esta Nación, ahora necesitamos de la descentralización para que no se destruya” (Francoise Mitterand, Lyon, 1981).
Chile ya inició ese camino. Lo anticipa el éxito de la convocatoria de los alcaldes, más allá del intento de acallarla de varios medios de comunicación del centralismo. Lo proyectan los propios cambios institucionales ya logrados, en especial la aprobación de la elección de gobernadores regionales que ocurrirá en octubre de 2020, en conjunto con alcaldes, concejales y constituyentes.
LAS DIMENSIONES DE LA DESCENTRALIZACIÓN.
En el año que viene, Chile tiene la oportunidad, única en su historia, de sentar las bases sólidas de un proceso de desarrollo equitativo social y territorialmente.
Por una parte, es necesario completar el proceso de cambios constitucionales y legales que fijan las reglas del juego que pongan fin al centralismo y abran espacios a la descentralización. La Nueva Constitución en ciernes es el texto que debiera concretar esa meta. Por ello, la Fundación Chile Descentralizado… Desarrollado ha convocado a un grupo de 20 especialistas para que recojan y sistematicen los aportes de muchos en propuestas concretas que comiencen a conocerse, debatirse, mejorarse y llevar a puerto en 2021.
Por otra, es fundamental preparar la gobernanza territorial que Chile necesita. Hay un desafío que ya está en la Ley: los candidatos a gobernadores regionales están obligados a presentar un “programa de gobierno”, esos programas requieren alcanzar altos estándares de calidad y pertinencia. Para motivar la reflexión y el debate la Fundación ha iniciado en 2019, y continuará con mayor fuerza en 2020, la organización de “Debates Programáticos Regionales” en cada una de las 16 regiones del país. Estos eventos se constituyen en punto de encuentro entre los actores políticos y las demandas del mundo social, académico y privado propios de cada territorio.
Esta dimensión de la gobernanza exige agregar otro ingrediente. No solo tener programas pertinentes y de calidad. También generar instrumentos que permitan encontrar la participación social con las evidencias. Ser capaces, entonces, de generar los conocimientos técnicos y los datos concretos que avalen las mejores decisiones. En esta línea, la Fundación está impulsando el desarrollo de proyectos piloto para la creación de centros o sistemas de pensamiento estratégico territorial. En estos días culmina el primer estudio de aceptabilidad en la Región de Atacama. Para 2020 la invitación es agregar nuevas regiones a esta tarea. Un desafío que es técnico y político, porque exigirá rigor académico y servirá de base a una real participación social informada; tanto para establecer prioridades, como para verificar el cumplimiento de los programas con idoneidad, probidad y transparencia.
ENTREVISTA
Por Jaime Gré, periodista, Director de Comunicaciones Fundación Chile Descentralizado
Alejandro Ferreiro (53) es abogado de la Universidad de Chile y Master of Arts de la Universidad de Notre Dame. Tiene una amplia y reconocida trayectoria en el servicio público (Ministro de Economía 2006-2008; Superintendente en diversos ámbitos como Isapres, Fondos Pensiones, Valores y Seguros), así como docente de diversas universidades.
Su cercanía a los temas de descentralización no es nueva. Fue miembro de la Comisión Asesora Presidencial de la Presidenta Michele Bachelet (2014) y coordinador de las propuestas de descentralización del libro 95 Propuestas para un Chile Mejor. Actualmente se desempeña como director de empresas, presidente de la Junta Directiva de la Universidad de Talca y director del Centro de pensamiento Espacio Público, entre otras actividades.
¿Cómo ve Ud el tema de la descentralización en la coyuntura social y política actual? ¿Lo ve Ud como una oportunidad?
Es una gran oportunidad, por cierto, pero sin certezas de que podamos aprovecharla plenamente. La experiencia internacional muestra que la descentralización puede mejorar la acción política, su legitimidad y la renovación de liderazgos cercanos a las personas. Eso ayudaría mucho a cerrar la grieta que hoy parece existir entre representantes y representados. Sin embargo, en el actual contexto, la relevancia en la agenda pública de la descentralización disminuye y se posterga. No ha sido posible mejorar este año las leyes de febrero del 2018, lo que deja abierta mucha incertidumbre en las competencias que tendrán los nuevos gobernadores, su convivencia con el delegado presidencial y los recursos de los que dispondrán. En tal sentido, la oportunidad de la que hablamos puede derivar en un riesgo mayor: la frustración de expectativas.
Se supone que esta situación puede desembocar en un nuevo trato. ¿Cómo cree Ud. se podría abordar en ese nuevo trato lo de la desigualdad territorial?
La descentralización, en este caso, la regionalización, releva la identidad de los diversos territorios y de las expectativas de su población. Les da un cauce o expresión político-administrativa mediante la elección de gobernadores. Por primera vez, esos gobernadores se deberán a sus electores y ya no al presidente de la república, como en el caso de los actuales intendentes. Por otro lado, existe el riesgo de que la exacerbación de la soberanía regional, especialmente en el plano fiscal, puede derivar en desigualdades mayores que cabe prevenir, especialmente si cada región pudiese cobrar impuestos para su propio destino sin contemplar alguna forma de compensación para las regiones más pobres o con menos capacidad de recaudación tributaria. Por otro lado, las desigualdades territoriales no solo existen entre Santiago y las regiones, sino también al interior de estas. Y ello no se corrige de manera espontánea al elegir gobernadores. Por esto, el tema de la desigualdad territorial es complejo y requiere un abordaje en varias dimensiones. Lo cierto, y promisorio, es que la descentralización política que se genera al elegir gobernadores permite que el tema se haga visible y cuente con autoridades electas que deban responder por el tema y abordarlo frontalmente.
En el debate de una nueva constitución, en su opinión qué aspectos o principios debiera contener esa nueva constitución que favorezcan y/o garanticen una efectiva descentralización?
Creo que una nueva Constitución debiera dibujar con claridad la distribución de competencias entre el gobierno central y regional. Idealmente debiera definir el bloque de competencias que en el mediano plazo son materia de los gobiernos regionales. Si ello ocurre, creo que debieran darse competencias al Tribunal Constitucional que resulte del cambio constitucional, para dirimir los conflictos de competencia entre los distintos niveles de gobierno, al estilo de lo que ocurre en varias democracias europeas. No es posible que la ambigüedad sobre la materia de pie para que cada conflicto de competencias sea resuelto mediante la imposición del gobierno central.
Además, estimo imprescindible que la Constitución garantice criterios objetivos para la distribución de transferencias fiscales a las regiones. Se trata de instalar el principio de “interdicción de la arbitrariedad fiscal”. Esto es fundamental en el nuevo escenario en el que no coincidirá el color político del gobierno central con el de los gobernadores regionales. Los espacios de discrecionalidad arbitraria en las transferencias a regiones deben cerrarse para evitar que ello permita castigar a las regiones opositoras y favorecer a las afines. Para que ello sea eficaz, debe contemplarse a nivel constitucional, de modo que las mayorías parlamentarias no puedan abusar de las minorías opositoras expresadas en algunos gobiernos regionales.
¿Cómo cree Ud. se podría rescatar la dimensión territorial del proceso constituyente?
Para que la dimensión territorial cobre relevancia en el debate constitucional debemos recordar y reforzar las ventajas políticas de la regionalización como modo de oxigenar una clase política cuestionada: nuevos liderazgos, más cercanos, nuevos movimientos, nuevas formas de participación. Las elecciones regionales pueden ayudar a una necesaria renovación de la política, y creo que eso debe resaltarse en el marco del debate que viene. Por otro lado, una sociedad que aspira a una mejor distribución del poder, debe rescatar la importancia potenciar los gobiernos subnacionales. Por eso, me parece que a poco andar, y con más fuerza cuando los constituyentes comiencen a debatir el nuevo texto, los capítulos sobre gobiernos regionales y municipales recuperarán un merecido protagonismo. En tal sentido, la nueva constitución será, casi con certeza, mucho más favorable a una efectiva descentralización que la actual. Lo que importará entonces será decidir que elementos esenciales del nuevo orden de gobiernos subnacionales debe estar en la Constitución, y cómo lograr le apoyo de los dos tercios para instalarlos en la ley fundamental.
En el marco actual, muchas regiones han realizado cabildos, diálogos o encuentros, y llama la atención que el tema descentralización no aparece destacado. ¿A qué lo atribuye Ud.? ¿Y qué recomendaría hacer para que el tema se tornara relevante?
No siempre la importancia de la descentralización ha sido reconocida por los propios habitantes de las regiones. La conmoción después del estallido ha dado paso a una agenda social e institucional en que este tema queda tapado por otros. Con el paso de los días, se volverá a hacer nítido el potencial participativo, de renovación de liderazgos y de desconcentración del poder político que ofrece el tema regional. Es de esperar que todos los que creemos en las virtudes y oportunidades del proceso tengamos la capacidad de expresar ese mensaje con eficacia y responsabilidad.
ARTÍCULO
El Diálogo Programático del Bio Bío tiene méritos notables. Ha sido el primero que se ha realizado en el nuevo escenario político y social que vive Chile. Sorteando las dificultades de una convocatoria realizada en medio de manifestaciones ciudadanas y desbordes violentos, logró reunir a las principales organizaciones del regionalismo penquista. Además, es el primer gran evento organizado por el Capítulo Regional del Bio Bío de Chile Descentralizado, ahora bajo la dirección del académico Armando Cartes.
En el Aula Magna de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Concepción estuvieron presentes académicos de diversas universidades, representantes del mundo empresarial y social y precandidatos al cargo de gobernador regional. Estos últimos con sus primeras reflexiones en la perspectiva de definir propuestas programáticas. El evento se realizó con el auspicio de la Fundación Hanns Seidel.
El Acto Inaugural reunió al Decano de la Facultad Rodolfo Walter y al Presidente del Capítulo Regional, Armando Cartes quienes expresaron el compromiso de sus instituciones con el avance exitoso del proceso descentralizador.
Las intervenciones centrales estuvieron a cargo de Heinrich von Baer y Violeta Montero. El presidente de la Fundación Chile Descentralizado expuso las líneas centrales del trabajo por la descentralización en el nuevo escenario. Subrayó la necesidad de trabajar en forma simultánea y convergente en la elaboración de los contenidos constitucionales de un Estado unitario descentralizado y en las propuestas de programas regionales pertinentes y de calidad. Señaló que la Fundación compromete sus esfuerzos en ambas líneas de trabajo para el año 2020. Por su parte, la Directora del Magister en Política y Gobierno, expuso los resultados de la encuesta del Barómetro Regional de la Región del Bio Bío con énfasis en la necesidad de difundir mejor las próximas elecciones de gobernador regional debido al alto nivel de desinformación ciudadana en esta materia (sobre el 80% declara no tener información al respecto). A pesar de esa falencia indicó que un porcentaje relevante de ciudadanos tiene expectativas positivas de la creación del cargo de gobernador regional.
En el primer panel estuvieron representadas las demandas ciudadanas a las nuevas autoridades. Los diversos sectores expresaron confianza en que la elección del gobernador regional servirá para impulsar el desarrollo territorial. Las visiones de los representantes del mundo privado, social y académico fueron convergentes. La presidenta de CorBioBío, Liliana Lamperti, subrayó acuerdos con Chile Descentralizado en el itinerario y perspectivas del proceso descentralizador, su intervención culminó con un sentido homenaje al líder regionalista Claudio Lapostol. El presidente de COSOC Chile, Juan Carlos Venegas, la entidad que agrupa a los consejeros de la sociedad civil frente a las autoridades nacionales y territoriales de todo el país, también fue enfático en valorar la elección de gobernadores regionales y del proceso de elaboración participativo de los programas que presentarán las personas que se presenten a ese cargo. Por su parte, el académico y ex rector de la Universidad del Bio Bío, Héctor Gaete subrayó el aporte que puede hacer la gran cantidad de recursos humanos calificados que habitan en las regiones de Chile y, también, llamó a valorizar la contribución que la política y los políticos pueden hacer al futuro del país, más allá de los cuestionamientos generalizados que hoy reciben desde la opinión pública.
El segundo panel sirvió para una primera presentación de las personas que han manifestado intención de presentarse a las primarias de gobernador regional. Cada uno desde sus posiciones políticas y experiencias expresaron su compromiso de trabajar por la elaboración de programas de gobierno regional que orienten el desarrollo del Bio Bío.
Los participantes de este panel fueron Flor Weisse consejera regional de la UDI, Javier Sandoval consejero regional del Frente Amplio, Renzo Galgani del PRO, el concejal DC Jaime Monjes y el ex gobernador de Concepción, también DC, Eric Aedo. Todos valoraron ser invitados a este primer intercambio de planteamientos para el futuro de la región.
ARTÍCULO
En dos intensas jornadas, 18 y 19 de diciembre, el Capítulo Regional Aysén de la Fundación Chile Descentralizado… Desarrollado y la Universidad de Aysén impulsaron los primeros diálogos regionales en el contexto de los procesos constituyente y de descentralización política.
En la primera jornada se firmó el Convenio de Colaboración entre Universidad y Fundación. El Acto fue inaugurado por sendas intervenciones de la presidenta del Capítulo Regional de Aysén, Irina Morend, y la rectora de la Universidad de Aysén, Natacha Pino. Ambas resaltaron la importancia estratégica de esta alianza en beneficio de un desarrollo justo y equilibrado para la Región de Aysén.
El acto tuvo dos presentaciones: “Nueva Constitución para un Chile Descentralizado” a cargo de Heinrich von Baer, Presidente Nacional de la Fundación Chile Descentralizado, y “Barómetro Regional 2019” presentado por Gonzalo Delamaza, académico del CEDER de la Universidad de Los Lagos.
La primera puso foco en la oportunidad que existe en la actual etapa política de propiciar un avance significativo del proceso descentralizador a partir de la convergencia entre el proceso constituyente y la elección de gobernadores regionales.
La segunda dio cuenta del estado de la información y la opinión de las regiones sobre los temas de la descentralización. La encuesta realizada entre junio y julio concluye, entre otros aspectos, que hay una gran desinformación sobre la elección de los gobernadores regionales; y al mismo tiempo, expectativas significativamente optimistas sobre el impacto positivo de la descentralización para un desarrollo territorialmente más equilibrado que favorezca a las regiones.
Posteriormente, se efectuó un diálogo con amplia participación de los asistentes.
En la segunda jornada hubo dos actividades públicas. En la primera un coloquio sobre “El Rol de las Universidades Regionales en el proceso de descentralización” organizado por la Dirección de Vinculación con el Medio de la Universidad de Aysén. En esta instancia se compartieron experiencias de distintas universidades regionales en el marco del proceso de participación ciudadana tras el estallido social de octubre. El intercambio de experiencias y opiniones generó un consenso acerca de la gran oportunidad para que las universidades regionales rediseñen de manera permanente sus estructuras y políticas de vinculación con el medio.
La segunda actividad fue un “Diálogo Ciudadano” en torno a tres ejes de reflexión. El primero sobre Proceso Constituyente y perfil de los Asambleístas, el segundo sobre Prioridades para la elaboración de programas de gobierno regional y el tercero sobre las tareas propias de la participación ciudadana en todo el proceso. Con tres mesas de trabajo y una metodología creativa e iterativa se generó una reflexión colectiva con amplia participación.
En todas estas instancias participaron académicos, funcionarios públicos, representantes populares, dirigentes sociales, estudiantes y público en general. El Capítulo Regional de Aysén se plantea la tarea de continuar este trabajo con un “Diálogo Programático Regional” entre marzo y abril del próximo año, en el marco de un creativo proceso de planificación estratégica.