Opinión
Veinte años de Los Federales: un nuevo comienzo
En septiembre del 2009 decidimos resucitar a Infante y la autonomía regional al crear Los Federales, uniendo actores de izquierda y derecha que propugnábamos una descentralización profunda. Barrueto y Horvath como parlamentarios creíbles y sensibles a la contaminación de Talcahuano y Aysén; Diego Benavente, de corporaciones empresariales de Temuco y el empresario Raimundo Aránguiz, de la derecha regionalista; Giorgio Martelli lideró una década la Asociación Chilena de Municipios, el abogado DC Luis Hernández hacía de minoría profética en los círculos de la SEGPRES, el geógrafo José Abalos,que coordina hoy las Universidades Regionales y el economista Horacio Alesandrini. Además simpatizó con la idea Lily Pérez y se contó con la protesta la joven antropóloga Magaly Mella, líder de proyectos reconocimiento a los mapuche.
Hicimos el loco, vestidos de negro para pedir elección de intendentes, ley de rentas, tren al sur y ley espejo de metros para los territorios. Se interrumpió a Presidentes exigiendo que se escuchara a los territorios, que Chile era inviable con la hipertrofia de Santiago, el Valle central que se seca.
Con la firmeza de Antonio Horwarth se logró crear bancada regionalista que operaba con mayor fuerza en la Cámara y se destrabó el royalty minero, casinos regionales con renta relevante, ley espejo al Transantiago y se abrieron centros culturales y universidades donde no las había. Y con Bachelet II nos articulamos en la Comisión Presidencial empujada por los «exiliados» Peñailillo y Martelli, donde tuvimos la presidencia y comisiones claves. Benavente, Ábalos, Hernández, María Ignacia Jiménez y José Marimán empujaron hasta el cansancio un documento de consenso, con una mapa de descentralización sustantiva con un aliado consecuente como Heinrich Von Baer.
Lograda la elección de gobernadores regionales y un proceso mediano de competencias en planes claves (transporte, medio ambiente), gobernanza metropolitana y divisiones de movilidad, desarrollo social y fomento, sobreviene un nuevo proceso donde el «fantasma federal» deberá cobrar fuerza para lograr que exista la ley de rentas regionales y no migajas cooptativas, que se permita endeudarse para mega proyectos, que puedan colocar las regiones los directores delas empresas públicas, alcanzar una gobernanza responsable de las cuencas y la planificación territorial vinculante para la sustentabilidad de los territorios como lo buscó de manera ejemplar Antonio Horvath y, que hoy defienden sus amigos Patricio Segura y Miriam Chible en la Patagonia profunda.
Veinte años no es nada para romper el paternalismo autoritario del centralismo y enfrentarse a la oligarquía económica y política del Barrio Alto santiaguino.
Nos prometimos que antes de cinco años viajaríamos de Concepción a Puerto Montt para emprender en bote un viaje a los canales eternos para recordar a Antonio. Si no hay rentas regionales con mayor empoderamiento regional ni aquel tren mítico y necesario, pronto, muy pronto, se cortará Chile en dos y no serán unos estrafalarios vestidos de negro, seremos muchos y muchas, con banderas diversas, para emprender una travesía regionalista 70 veces mayor que aquella en que le dijimos al Ministro Insulza el 2005 que no cumplió nada de lo prometido por Lagos.
Vigilen la facción federalista que se articula en el sur y en el norte.
Fuente: https://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/columnas/2019/09/23/veinte-anos-de-los-federales-un-nuevo-comienzo/